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Efectos secundarios del tratamiento: disfunción urinaria


Por disfunción urinaria queremos decir que el paxciente puede presentar tanto pérdida de orina involuntaria (incontinencia urinaria) como los síntomas irritativos (urgencia miccional).
La incontinencia es variable pudiendo darse casos de escasas pérdidas hasta pérdida completa del control de la vejiga.
Los síntomas irritativos, incluyen tanto un aumento de la frecuencia urinaria, como la urgencia miccional y el dolor al orinar conocido como disuria. Muchas veces los sintomas irritativos son explicados por la existencia concomitante de una hiperactividad vesical;  sin embrago también pueden explicarse como consecuencia de lesión de los nervios y músculos que regulan el control urinario durante la cirugía. Esta lesión siempre trata de evitarse, pero es frecuente.

Los varones que se vayan a someter a cirugía, sea esta a cielo abierto o laparoscópica,  la incontinencia siempre será una consecuencia frecuente. Se estima que luego de seis meses después del tratamiento aproximadamente el 25% de los hombres sufre pérdida frecuente de orina o ausencia de control y la necesidad de utilizar pañales. Al cabo de tres años, menos del 10% necesita usar pañales alguna vez.
De 30 a 50% de los hombres con función inicial normal se producirá un aumento de los síntomas urinarios y la aparición de urgencia miccional tras la prostatectomía. Esto parece ser menos frecuente si se realiza una técnica que preserve los nervios.

En el caso de radioterapia de haz externo, este tratamiento puede irritar tanto la vejiga como la uretra, causando inflamación de la próstata. Los síntomas en este caso disminuyen con el paso del tiempo, e incluso con muy poca o ninguna intervención: casi el 45% de los hombres reporta síntomas miccionales irritativos después de seis meses, la mayoría de los cuales se resuelven al cabo de un año y menos del 10% de los hombres requiere aún pañales después de tres años. No obstante, hasta un 20-40% de los hombres con función inicial normal seguirá teniendo un aumento de los síntomas urinarios.

Cuando un varón ha sido sometido a braquiterapia los síntomas son ser inicialmente más severos. Más del 70% de los hombres tiene síntomas que requieren pañales o medicamentos en los seis meses después del implante de semillas de radiación, pero la tasa disminuye al 25% o menos después de dos años y a menos del 10% al cabo de tres años. Sin embargo, el 20-40% de los hombres con función urinaria inicial normal tendrá un aumento persistente de los síntomas urinarios tres años después de recibir braquiterapia.

En resúmen, es muy frecuente que se tenga alguna forma de disfunción urinaria después de la terapia inicial para el cáncer de próstata localizado. Pero es importante entender que no todos los síntomas son normales y que algunos requieren atención médica inmediata. Continuar trabajando con su urólogo para optimizar la función urinaria forma parte importante de su atención médica continua. 


El artículo ha sido elaborado basado en información dela Prostate Cancer Foundation. http://www.pcf.org/